
Jugar un Master 1000 por primera vez debe ser una sensación abrumadora, pero llegar a las semifinales del mismo es difícil de asimilar. Esta es la situación en la que está ahora mismo el argentino Fran Cerundolo, quien, a sus 23 años, y en su debut en el Master 1000 de Miami, ha logrado convertirse en uno de los 4 últimos jugadores en pie.
El mayor de los Cerundolo, que hasta ahora no había ganado un partido oficial en superficie dura, ha logrado una gran gesta al convertirse en la revelación del torneo. Sin duda, ver al argentino en esta semifinal es una de las razones por las que el tenis nos hace vibrar.
El camino del actual número 103 del mundo, no ha sido nada fácil, derrotando a jugadores mas acostumbrados a estas pistas como pueden ser el francés Gael Monfils o el holandés Tallon Griekspoor.
Los octavos de final contra el Frances Tiafoe tuvieron un componente especial al poder “vengar” a su hermano Juan Manuel, quien había caído ante el estadounidense en la ronda anterior.
Tras su victoria, le esperaba en cuartos de final el talentoso Jannik Sinner, quien había derrotado de manera sólida al siempre difícil Nick Kyrgios.
Así pues, el argentino saltaba a la pista sabiendo que no tenía nada que perder y que debía hacer su juego para intentar llevarse la contienda. Sin embargo, el físico del joven italiano le obligaba a retirarse del partido cuando caía por 4-1 en el primer set.
Al igual que ocurría en primera ronda con Reilly Opelka, Fran Cerundolo accede a la siguiente ronda con la retirada de su rival, no obstante, este no es un motivo que pueda empañar la gesta lograda por el joven argentino.
Fran espera ya en semifinales al vencedor del partido entre Alexander Zverev y Casper Ruud. Ahora tendrá tiempo para asimilar el sueño que está viviendo, tal y como reconocía en la entrevista post partido, y poner a punto esa potente derecha para sus primeras semifinales de Master 1000.
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