Con esta victoria, Shelton logra su primer título en el circuito ATP a la edad de 21 años, y asciende al selecto grupo de los 15 mejores tenistas del mundo.
El partido se caracterizó por una notable igualdad en el primer set, mientras la noche caía sobre la ciudad de Tokio.
El primer juego de Shelton resultó particularmente desafiante
Con dificultades para ejecutar uno de sus tiros principales, pero logró salvar una oportunidad de quiebre. A partir de ese momento, el dominio del servicio fue crucial, con intercambios de puntos cortos y cada jugador manteniendo su turno al saque.
Sin embargo, en un momento crítico con el marcador empatado 5-5, Aslan Karatsev, visiblemente fatigado, cometió errores que Ben Shelton supo capitalizar. Shelton logró un quiebre crucial, lo que marcó la diferencia en ese primer set, que finalizó 7-5 a su favor.
La agresividad de Karatsev lo llevó a la red en varias ocasiones
En los primeros juegos del segundo set, la agresividad de Karatsev lo llevó a la red en varias ocasiones, lo que resultó en errores no forzados y oportunidades para Shelton. Un juego clave fue el 1-1, donde Karatsev desaprovechó una ventaja de 30-40 debido a la perseverancia de Shelton.
Posteriormente, Shelton consiguió otro quiebre con un golpe paralelo, estableciendo una ventaja sólida de 4-1.
Este nuevo quiebre dañó considerablemente las esperanzas de Karatsev en el torneo, y Shelton aprovechó al máximo la situación. A medida que Karatsev cometía más errores, Shelton demostraba eficacia en su juego.
Finalmente, Shelton cerró el partido con un marcador de 6-1, asegurando su victoria como campeón.
La actuación de Ben Shelton en el ATP 500 de Tokio no solo le otorga un título de prestigio, sino que también lo impulsa al reconocimiento entre los mejores tenistas del mundo. Su capacidad para adaptarse a las condiciones del partido y capitalizar las debilidades de su oponente lo convierten en un digno campeón de este torneo de alto nivel.
