Esta victoria marcó el regreso triunfal de Medvedev a la competición después de su destacada actuación en el US Open, donde solo Novak Djokovic pudo detenerlo. Después de 19 días de su hazaña en Nueva York, el ruso volvía a la acción oficial, enfrentándose nuevamente a Tommy Paul, quien ya lo había derrotado en Roland Garros en 2021.
Un comienzo complicado para Medvedev
El partido comenzó con ciertas complicaciones para el tenista ruso, especialmente en su primer saque. Tommy Paul aprovechó la cuarta oportunidad de quiebre para tomar la delantera en el marcador. Para Medvedev, quien ostenta el puesto número 13 en el ranking ATP, esta derrota hubiera significado su quinta consecutiva, y por un momento, parecía que Paul podría sorprender. Sin embargo, Medvedev reaccionó rápidamente y logró un contrabreak que igualó el marcador. Luego, consolidó su ventaja con otro quiebre, demostrando su superioridad en la cancha.
Medvedev impone su dominio
Cada juego disputado por parte de Tommy Paul se convirtió en un desafío constante para su oponente, con Medvedev presionándolo en múltiples ocasiones. Esto finalmente condujo a otro quiebre en el marcador, esta vez con un 2-5 en contra de Paul. Medvedev lo confirmó con autoridad, asegurándose así el primer set.
A pesar de los tres primeros juegos del segundo set, donde Tommy Paul parecía tener cierta comodidad con su servicio, esta ilusión no duró mucho. Medvedev volvió a la carga y la brecha en el marcador volvió a aumentar a su favor. Llegó hasta un contundente 1-4, y en otro juego en el que Paul no pudo mantener su saque, se vislumbraron dificultades para el estadounidense. Finalmente, Medvedev sirvió para el partido con un marcador de 5-1 y, sin mayores complicaciones, cerró en blanco ese último juego ante Tommy Paul, avanzando con éxito en el ATP 500 de Pekín.
El desempeño de Daniil Medvedev en este partido refleja su habilidad excepcional en la cancha y su determinación para seguir triunfando en el mundo del tenis. Con esta victoria, deja en claro que es un contendiente formidable en cualquier torneo y un rival al que nadie subestima. Continuaremos siguiendo de cerca su actuación en el ATP 500 de Pekín y en futuros eventos, esperando más momentos emocionantes como este.
